Recuerdo que en mi infancia las películas de cowboys me resultaban insufribles. Sin embargo debo decir que algunos personajes de ciertas series de televisión de antaño me resultaban muy pero muy atractivos. Los pelos de Pernell Roberts en "Bonanza", Las camisas abiertas de Lee Majors en "Valle de Pasiones", las recurrentes fantasías parentales con Chuck Connors en "El hombre del rifle", y por supuesto, el bellísimo físico velludo de Robert Conrad que siempre podía verse en "Jim West" fueron material nutrido para mis primeras pajas.
Hoy me es interesante encontrar deliciosos resabios de aquellas tantas tardes de televisión hogareña en blanco y negro cuando miro estas fotografías de cowboys desnudos. Imposible no asociar con el lejano oeste de mi lejana adolescencia.
